El Abiox es un antibiótico cuyo principio activo es el Moxifloxacino. Se utiliza para variedad de infecciones bacterianas. A continuación explicaremos todo lo relacionado con este medicamento para tomarlo de forma segura: para qué se utiliza, cómo tomárselo, posibles efectos secundarios y con qué fármacos hay que evitar combinarlo.
Composición, forma farmacéutica, mecanismo de acción y administración
Abiox es un comprimido recubierto con película que contiene 436,37 miligramos de hidrocloruro de moxifloxacino. Pertenece al grupo de antibióticos fluoroquinolonas y actúa eliminando bacterias que causan infecciones.
Los comprimidos de Abiox deben tomarse por vía oral y tragarlos enteros con agua u otros líquidos. Pueden tomarse independientemente de las comidas.
La duración del tratamiento debe ser la indicada por el médico, no hay que dejar el tratamiento antes, ni alargarlo.
Indicaciones de Abiox
Abiox está indicado en el tratamiento de diversas infecciones bacterianas en adultos. Las principales patologías que se tratan con Abiox son:
- Sinusitis bacteriana aguda
- Exacerbación aguda de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica
- Neumonía adquirida en la comunidad, excepto casos graves
- Enfermedad inflamatoria pélvica leve o moderada en combinación con otros antibióticos
- Infecciones de la piel y tejido blandos que ya han presentado mejoría con moxifloxacino intravenoso
Contraindicaciones y precauciones de Abiox
Las personas alérgicas al moxifloxacino y a otras quinolonas (un tipo de antibióticos), no deben tomar Abiox. Tampoco debe tomarse durante el embarazo, en personas menores de edad ni personas con insuficiencia hepática.
Se han observado cambios en el electrocardiograma (prolongación de QT) después del tratamiento con moxifloxacino, por lo que está contraindicado en pacientes con prolongación del QT, alteraciones electrolíticas, bradicardia, insuficiencia cardíaca y arritmias. En algunos pacientes que usan antibióticos de esta clase, se ha visto mayor riesgo de aneurismas y disección aórtica, así como problemas en las válvulas del corazón. Por este motivo, no debería utilizarse en personas con riesgo de padecer estas condiciones.
En algunos casos, los pacientes tratados con este tipo de antibióticos, han presentado alteraciones cutáneas graves, como la necrólisis epidérmica tóxica, síndrome de Stevens-Johnson y pustulosis exantémica generalizada aguda. Si se observa la aparición de algún síntoma cutáneo, es importante acudir al médico.
El tratamiento con quinolonas puede provocar convulsiones, por ello, hay que utilizarse con precaución en pacientes con antecedentes de convulsiones o epilepsia.
Se han notificado casos de polineuropatía (que cursa con alteraciones en la sensibilidad) en pacientes que han tomado quinolonas. Por ese motivo, si sientes hormigueo, quemazón, dolor o entumecimiento, hay que acudir al médico.
Hay cierta asociación con reacciones psiquiátricas, por lo que no se aconseja en pacientes con trastornos psicóticos u otras enfermedades psiquiátricas.
Es frecuente la aparición de diarrea asociada a antibióticos y colitis asociada a antibióticos.
Hay que tener en cuenta que el uso de moxifloxacino en pacientes con miastenia gravis conlleva riesgo de empeoramiento de los síntomas de la enfermedad.
El uso de moxifloxacino se ha asociado con un mayor riesgo de tendinitis y rotura de tendones. Ese riesgo es mayor en pacientes de edad avanzada, insuficiencia renal, trasplantados de órganos y pacientes que también toman corticosteroides.
El moxifloxacino puede provocar alteraciones del azúcar en sangre, tanto bajadas como subidas, por lo que deberá controlarse la glicemia en pacientes diabéticos.
Las personas con deficiencia de gluocsa-6-fosfato deshidrogenasa son propensas a sufrir reacciones hemolíticas al tomar quinolonas, por lo que el Abiox, debe utilizarse con precaución en estos casos.
El tratamiento con moxifloxacino puede interferir con el cultivo de especies de Mybobacterium spp, por supresión del crecimiento micobacteriano produciendo falsos negativos en el resultado.
Efectos secundarios de Abiox
- Infecciones: sobreinfecciones debidas a bacterias resistentes o hongos.
- Trastornos de la sangre: anemia, disminución de los leucocitos, neutrófilos y plaquetas, trombocitemia, eosinofilia, aumento del INR.
- Trastornos del sistema inmunológico: reacciones alérgicas, anafilaxia, angioedema.
- Trastornos del metabolismo: hiperlipemia, hiperglucemia, hiperuricemia.
- Trastornos psiquiátricos: ansiedad, hiperactividad, depresión, alucinaciones, delirio.
- Alteraciones del sistema nervioso: dolor de cabeza, mareo, parestesia, alteraciones del gusto, confusión, desorientación, alteraciones del sueño, temblor, vértigo, somnolencia, alteraciones del olfato, alteraciones de la coordinación, convulsiones, problemas de concentración, alteraciones del habla, amnesia y neuropatía periférica.
- Trastornos oculares: alteraciones visuales, visión doble, visión borrosa.
- Trastornos del oído: acúfenos, déficit auditivo.
- Trastornos cardíacos: prolongación de QT, palpitaciones, taquicardia, fibrilación auricular, angina de pecho, taquicardia ventricular, síncope.
- Trastornos vasculares: vasodilatación, hipertensión, hipotensión.
- Trastornos respiratorios: dificultad para respirar
- Trastornos gastrointestinales: náuseas y vómitos, dolor abdominal, diarrea, pérdida del apetito, estreñimiento, gases, gastritis, disfagia, colitis asociada a antibióticos.
- Trastornos hepáticos: aumento de transaminasas, alteraciones hepáticas, aumento de bilirrubina, ictericia, hepatitis.
- Trastornos de la piel: picor, urticaria, exantema, piel seca.
- Trastornos musculoesqueléticos: dolor de articulaciones, dolor muscular, tendinitis, calambres musculares, espasmos musculares, debilidad muscular.
- Trastornos renales: deshidratación, insuficiencia renal.
- Trastornos generales: dolor, edema, sudoración.
Interacciones de Abiox con otros medicamentos
El uso concomitante de Abiox con otros fármacos que pueden prolongar el intervalo QT está contraindicado. Estos fármacos son:
- Antiarrítmicos (quinidina, hidroquinidina, disopiramida, amiodarona, sotalol, dofetilida, ibutilida.
- Antipsicóticos (fenotiacinas, primocida, sertindol, haloperidol, sultoprida)
- Antimicrobianos (saquinavir, esparfloxacino, eritromicina, pentamidina, halofantrina)
- Antidepresivos tricíclicos
- Antihistamínicos (terfenadina, astemizol, mizolastina)
- Cisaprida, vincamicina, bepiridil, difemanilo.
Abiox debe tomarse con precaución junto a medicamentos que pueden reducir los niveles de potasio, estos son:
- Algunos diuréticos
- Laxantes y enemas
- Corticosteroides
- Amfotericina B
En caso de tomar agentes con cationes bivalentes o trivalentes, como antiácidos con magnesio o aluminio, didanosina, sucralfato y agentes con hierro y zinc, hay que esperar seis horas entre que se toman estos y el moxifloxacino.
Embarazo, lactancia y conducción
Los estudios con animales han mostrado toxicidad para la reproducción, pero se desconoce en humanos, por lo que Abiox no debe usarse en mujeres embarazadas. También está contraindicado en la lactancia. No tiene efectos sobre la fertilidad.
En cuanto a la conducción, en algunos pacientes que toman quinolonas, se ha visto que pueden producir un trastorno de la capacidad para conducir o manejar maquinaria, por lo que se aconseja esperar a ver cómo reacciona tu cuerpo al tomar Abiox, aunque de normal, no tendría por qué afectar a la conducción.