La acetilcisteína es un compuesto químico que se usa comúnmente como un medicamento para tratar diversas condiciones médicas. En este artículo hablaremos sobre cómo tomar correctamente la Acetilcisteína, las indicaciones, posibles efectos secundarios e interacciones con otros fármacos.
Para qué se toma la Acetilcisteína
La Acetilcisteína se utiliza para reducir la viscosidad de las secreciones mucosas con el fin de facilitar su expulsión, en procesos catarrales y gripes. Pertenece al grupo farmacoterapéutico de los mucolíticos.
- Mucolítico: La acetilcisteína se utiliza principalmente como un mucolítico, lo que significa que ayuda a disolver y aflojar el moco en las vías respiratorias. Esto la hace útil en el tratamiento de afecciones respiratorias como la bronquitis, la bronquiectasia y la fibrosis quística.
- Antídoto: También se usa como antídoto en casos de intoxicación por paracetamol (acetaminofén), ya que puede ayudar a prevenir el daño hepático al aumentar la producción de glutatión, un antioxidante importante en el hígado.
- Protección pulmonar: En algunos casos, se utiliza en pacientes que están en riesgo de complicaciones pulmonares durante procedimientos quirúrgicos o después de la exposición a ciertos agentes tóxicos.
Administración de Acetilcisteína
La acetilcisteína está disponible en varias formas farmacéuticas para su administración, dependiendo de la indicación y las necesidades del paciente. Las formas más comunes de acetilcisteína incluyen:
- Tabletas: La acetilcisteína se puede encontrar en forma de tabletas para administración oral. Estas tabletas suelen contener una dosis específica de acetilcisteína y se pueden tomar con agua u otro líquido. Las tabletas pueden ser de liberación inmediata o de liberación prolongada, dependiendo de la formulación del medicamento.
- Cápsulas: Al igual que las tabletas, las cápsulas de acetilcisteína están diseñadas para la administración oral y pueden contener una dosis específica del medicamento. Las cápsulas pueden contener acetilcisteína en forma de polvo o en forma de microgránulos, y pueden tener diferentes propiedades de liberación, como liberación inmediata o prolongada.
- Polvo para solución oral: La acetilcisteína también se puede encontrar en forma de polvo para la preparación de una solución oral. Este polvo se disuelve en agua u otro líquido para su administración oral. Esta forma de acetilcisteína es comúnmente utilizada en el tratamiento de afecciones respiratorias como la bronquitis y la fibrosis quística.
- Solución oral: Además del polvo para preparar una solución oral, la acetilcisteína también está disponible en forma de solución oral lista para usar. Esta forma de acetilcisteína es conveniente para aquellos que prefieren no tener que preparar la solución ellos mismos.
- Solución inyectable: En situaciones de emergencia o cuando se necesita una acción rápida, la acetilcisteína también se puede administrar por vía intravenosa en forma de solución inyectable. Esta forma de acetilcisteína se utiliza principalmente en el tratamiento de intoxicaciones por paracetamol (acetaminofén) y otras afecciones médicas graves.
- Comprimidos efervescentes
- Solución para nebulización
Puede tomarse con o sin comida y se recomienda beber abundante agua durante el día.
Contraindicaciones de la Acetilcisteína
- Alérgicos a la Acetilcisteína o a los excipientes del fármaco
- Niños menores de dos años
Precauciones al tomar Acetilcisteína
Puede producir obstrucción respiratoria en niños menos de dos años, por lo que no está recomendado en esta franja de edad.
Se recomienda tomar con precaución en caso de úlcera péptica.
Debe evaluarse el riesgo-beneficio de administrar Acetilcisteína en pacientes asmáticos o con antecedentes de broncoespasmo.
No se recomienda utilizar en pacientes con dificultad de expectorar, ya que podría aumentar la expectoración y el riesgo de broncoaspiración.
La Acetilcisteína suele tener mal olor, pero no quiere decir que esté dañada.
El medicamento contiene sodio, lo que sería un 9,7% de la ingesta diaria recomendada de sodio.
Efectos secundarios de la Acetilcisteína
- Alergia
- Shock anafiláctico
- Dolor de cabeza
- Somnolencia
- Tinnitus
- Taquicardia
- Hemorragia
- Broncoespasmo
- Disnea
- Náuseas y vómitos
- Diarrea
- Dolor abdominal
- Dispepsia
- Urticaria
- Angioedema
- Picor
- Aumento de la temperatura
- Edema facial
- Hipotensión
Interacciones con otros medicamentos
No se recomienda el uso concomitante con antitusivos, ya que inhiben el reflejo de la tos, dificultando la eliminación de las secreciones.
Tiene un posible efecto quelante, lo que quiere decir que la acetilcisteína puede reducir la biodisponibilidad de las sales de algunos metales como el calcio, el hierro y el oro.
La combinación de acetilcisteína con antibióticos como la anfotericina B, ampicilina, cefalosporinas, lactobiato de eritromicina y algunas tetraciclinas, puede ser físicamente incompatible.
La administración concomitante de nitroglicerina con acetilcisteína produce hipotensión.
La acetilcisteína puede disminuir los niveles de carbamazepina.
Uso en embarazo y lactancia
Es preferible evitar el uso de Acetilcisteína durante el embarazo, ya que se desconocen sus efectos. Tampoco se recomienda en la lactancia por el mismo motivo.
Efectos sobre la conducción
No se esperan efectos sobre la capacidad de conducir.